CIUDAD Y PROVINCIA FIRMARON AYER EL CONVENIO POR LOS RESIDUOS, QUE ANTICIPO CLARIN Acuerdo entre Macri y Scioli:
la Ciudad pagará un 20% más por la basura que manda al GBA Son $ 120 millones al año. Y pondrá otros $ 250 millones para dos nuevos rellenos.
Por: Daniel Gutman
JUNTOS. MACRI Y SCIOLI, AL FIRMAR EL PRIMER ACUERDO POR LOS TEMAS COMUNES ENTRE CAPITAL Y PROVINCIA.La Ciudad pagará $ 120 millones al año para enterrar en la provincia de Buenos Aires las 5.000 toneladas diarias de basura que genera y además se hará cargo íntegramente de la construcción de dos nuevos rellenos sanitarios y de dos plantas de transferencias en la provincia, cuyo costo se estima en unos $ 250 millones.
Se trata de un aumento del 20% con respecto el monto que hoy paga la Ciudad, que es de aproximadamente $ 100 millones, según confirmó a Clarín el ministro de Ambiente porteño, Juan Pablo Piccardo. La tarifa actual es 55 pesos por tonelada, que se desglosan en 30 por el transporte y 25 por el enterramiento propiamente dicho.
El incremento es el resultado del acuerdo de "gestión integral de los residuos sólidos urbanos", que firmaron ayer Mauricio Macri y Daniel Scioli. Como contraprestación de este esfuerzo económico porteño, la provincia se comprometió a encontrar los lugares donde se instalarán los nuevos rellenos sanitarios y plantas de transferencia, misión que exigirá un fino trabajo político, por la fuerte resistencia vecinal que despierta en todos lados la llegada de la basura.
Macri y sus funcionarios se mostraron satisfechos con un acuerdo que se presentó como la plataforma "para darle sustentabilidad por los próximos 20 años a la CEAMSE", la empresa estatal que está a cargo de los rellenos sanitarios, que desde hace años enfrenta cuestionamientos desde el punto de vista ambiental.
Con el tema de la disposición final de los residuos medianamente resuelta, ahora a Macri le falta resolver la cuestión de la recolección de basura en la Ciudad. Con los contratos que se renovarán en febrero próximo, la Comuna aspira a corregir algunos problemas con el sistema de recolección actual.
De "amigo Daniel" y "querido Mauricio" se trataron recíprocamente el jefe de gobierno porteño y el gobernador bonaerense durante un acto que duró menos de veinte minutos. El escenario fue la Casa de la Provincia de Buenos Aires, en Callao al 200, donde se congregaron funcionarios y legisladores de los dos distritos y militantes gremiales de la CEAMSE, que aplaudieron un acuerdo que garantiza sus fuentes de trabajo. Afuera del edificio quedaron unos pocos vecinos de Ciudad Evita, que fueron a manifestarse en contra de que se instale en su barrio una de las dos plantas de transferencia (la otra estaría cerca de La Plata).
Los dos rellenos sanitarios nuevos -que podrán recibir unas 6.000 toneladas diarias de residuos, según el acuerdo- deben reemplazar a los de Ensenada y González Catán, que están cerca de su cierre después de muchos años de quejas vecinales por la contaminación.
El jefe de Gabinete bonaerense, Alberto Pérez, dijo que antes de fin de año espera tener definidas las localizaciones, que se harán "por consenso con los municipios, los Concejos Deliberantes y la sociedad civil".
El gobierno bonaerense espera seducir a intendentes y vecinos con promesas de obras públicas para los que acepten.
Aunque la Ciudad se comprometió en el acuerdo a trabajar para reducir el tonelaje de basura que se envía a los rellenos sanitarios, el ministro Piccardo reconoció a este diario que será un proceso extremadamente lento, al poner como ejemplo a Madrid, "donde empezaron con la recolección diferenciada hace 10 años y sólo han reducido un 5% el tonelaje que va a disposición final".
Se trata de un aumento del 20% con respecto el monto que hoy paga la Ciudad, que es de aproximadamente $ 100 millones, según confirmó a Clarín el ministro de Ambiente porteño, Juan Pablo Piccardo. La tarifa actual es 55 pesos por tonelada, que se desglosan en 30 por el transporte y 25 por el enterramiento propiamente dicho.
El incremento es el resultado del acuerdo de "gestión integral de los residuos sólidos urbanos", que firmaron ayer Mauricio Macri y Daniel Scioli. Como contraprestación de este esfuerzo económico porteño, la provincia se comprometió a encontrar los lugares donde se instalarán los nuevos rellenos sanitarios y plantas de transferencia, misión que exigirá un fino trabajo político, por la fuerte resistencia vecinal que despierta en todos lados la llegada de la basura.
Macri y sus funcionarios se mostraron satisfechos con un acuerdo que se presentó como la plataforma "para darle sustentabilidad por los próximos 20 años a la CEAMSE", la empresa estatal que está a cargo de los rellenos sanitarios, que desde hace años enfrenta cuestionamientos desde el punto de vista ambiental.
Con el tema de la disposición final de los residuos medianamente resuelta, ahora a Macri le falta resolver la cuestión de la recolección de basura en la Ciudad. Con los contratos que se renovarán en febrero próximo, la Comuna aspira a corregir algunos problemas con el sistema de recolección actual.
De "amigo Daniel" y "querido Mauricio" se trataron recíprocamente el jefe de gobierno porteño y el gobernador bonaerense durante un acto que duró menos de veinte minutos. El escenario fue la Casa de la Provincia de Buenos Aires, en Callao al 200, donde se congregaron funcionarios y legisladores de los dos distritos y militantes gremiales de la CEAMSE, que aplaudieron un acuerdo que garantiza sus fuentes de trabajo. Afuera del edificio quedaron unos pocos vecinos de Ciudad Evita, que fueron a manifestarse en contra de que se instale en su barrio una de las dos plantas de transferencia (la otra estaría cerca de La Plata).
Los dos rellenos sanitarios nuevos -que podrán recibir unas 6.000 toneladas diarias de residuos, según el acuerdo- deben reemplazar a los de Ensenada y González Catán, que están cerca de su cierre después de muchos años de quejas vecinales por la contaminación.
El jefe de Gabinete bonaerense, Alberto Pérez, dijo que antes de fin de año espera tener definidas las localizaciones, que se harán "por consenso con los municipios, los Concejos Deliberantes y la sociedad civil".
El gobierno bonaerense espera seducir a intendentes y vecinos con promesas de obras públicas para los que acepten.
Aunque la Ciudad se comprometió en el acuerdo a trabajar para reducir el tonelaje de basura que se envía a los rellenos sanitarios, el ministro Piccardo reconoció a este diario que será un proceso extremadamente lento, al poner como ejemplo a Madrid, "donde empezaron con la recolección diferenciada hace 10 años y sólo han reducido un 5% el tonelaje que va a disposición final".
Fuente: www.clarin.com
